Programa SAFA-IFOP concluye su segundo crucero científico de 2023
El crucero hidroacústico tiene por objetivo evaluar la biomasa de sardina y anchoveta, en la zona costera para complementar los monitoreos sumando datos que orienten la correcta toma de decisiones sobre el recurso.
La navegación abarca la región de Ñuble y Biobío incluyendo la bahía de Concepción, el golfo de Arauco y la isla Mocha
En el marco de las actividades de evaluación hidroacústica de pequeños pelágicos, el Programa SAFA, gracias al financiamiento del Gobierno Regional, realizó el segundo crucero científico del año para estimar la cantidad de biomasa (stock) de anchoveta y sardina común zona centro sur del país.
La realización de este segundo crucero hidroacústico constituye un importante paso en la obtención de datos científicos precisos sobre la biomasa de estos recursos. Según se explicó desde el IFOP, los resultados de esta evaluación contribuirán a la toma de decisiones informadas en la gestión y conservación de estos recursos pesqueros vitales para la economía, la pesca artesanal, y la seguridad alimentaria del país.
El crucero se desarrolló a lo largo de 20 días a bordo de la embarcación LM Capello, con una tripulación conformada por ocho personas, con el fin de cubrir la zona entre la costa y hasta las 5 millas marinas, ofreciendo una actividad complementaria a la evaluación hidroacústica realizada por el buque principal BC Abate Molina, y dejando esta zona de manera exclusiva para la pesca artesanal.
Según comentó el jefe de crucero, Adrián ibieta, “el Abate Molina, por razones técnicas y de seguridad, no puede recoger datos en zonas costeras. Por lo tanto, se adaptó una embarcación menor con equipos hidroacústicos similares a los utilizados en el buque principal, con el fin de cuantificar la densidad de peces en el área de sesgo”.
Por su parte, el biólogo marino e investigador SAFA, Heraldo Álvarez, agregó que “el SAFA apoyó con recursos para este monitoreo para que en la región del Biobío sea más intenso, a que me refiero, a que por ejemplo en estos estudios siempre se trabajan con transectas de 1 milla de distancia entre ellas; Gracias al SAFA, esto pasó de una distancia de 1 milla a 0,5 millas o sea la mitad de distancia entre transectas, permitiendo más muestras del recurso y un monitoreo más exhaustivo”.
Se detalló además que durante la navegación se realizó un total de 92 transectos perpendiculares a la costa, de los cuales 75 se llevaron a cabo en la región del Ñuble y Biobío, mientras que 17 transectos se realizaron en la región de la Araucanía y Los Ríos.
Además de las transectas, se llevaron a cabo 28 lances de identificación de especies con el objetivo de determinar su proporción y estructura de talla. En esa línea, Ibieta agregó que “se recolectó una muestra que fue trasladada al BC Abate Molina para su posterior análisis biológico completo, lo que permitirá obtener información más detallada sobre la salud y el comportamiento de las poblaciones de anchoveta y sardina común en la zona”.